Con enredaderas, árboles frutales y plantas comestibles estas cercas permiten no solo una producción de alimentos para animales y seres humanos, sino también embellecen el lugar, generan leña y flores para miel, aumentan la diversidad, atraen animales nativos y colaboran a controlar microclimas.
La primera cerca se construyó colindando con Mauricio Chaverri. Buganvilias, árboles frutales y flor de itabo. Bordeando la calle: truenos.